COMUNIÓN
El hombre está viviendo como una isla y es de ahí de donde surgen todas las desgracias. A lo largo de los siglos el hombre ha tratado de vivir ajeno a la existencia, algo imposible por la propia naturaleza de las cosas. El hombre no puede ser independiente ni dependiente. La existencia es un estado de interdependencia: todo depende de todo lo demás. No hay jerarquía, nadie está por arriba ni por debajo de los demás. La existencia es una comunión, una historia de amor eterna.
Pero la idea de que el hombre tiene que estar más alto, ser superior o especial, crea problemas. El hombre no tiene que ser nada; tiene que disolverse en la totalidad de las cosas. Cuando dejamos caer todas las barreras se produce la comunión, y esa comunión es una bendición. Ser uno con la totalidad lo es todo.
ARMONIA INTERNA Y EXTERNA
Heráclito dice: Las cosas no irían mejor si todo les ocurriera a los hombres según sus deseos. A menos que esperes lo inesperado no podrás encontrar la verdad, porque es difícil de descubrir y difícil de lograr. A la naturaleza le escanta esconderse. El señor cuyo oráculo está en Delfos, ni habla ni oculta; sólo da señales.
La existencia no tiene lenguaje..., y si dependes del lenguaje no podrás comunicarte con la existencia. La existencia es un misterio, no puedes interpretarlo. Si lo interpretas, lo pierdes. La existencia puede ser vivida, pero no pensada. Se parece más a la poesía que a la filosofía. Es una señal, es una puerta. Muestra, pero no dice nada. No podemos acercarnos a la existencia a través de la mente. Si piensas sobre ella, puedes seguir pensando, pero, por más que lo hagas, nunca la alcanzarás, porque el propio pensamiento es la barrera. El pensamiento es un mundo privado, te pertenece; a continuación te deja encerrado, encapsulado, prisionero dentro de ti mismo. Si no piensas, dejas de ser; dejas de estar encerrado. Estás abierto, te haces poroso, la existencia fluye dentro de ti y tú fluyes en la existencia.
Aprende a escuchar: escuchar significa estar abierto, vulnerable, receptivo, pero de ningún modo significa pensar. Pensar es una acción positiva. Escuchar es pasivo: eres como un valle que recibe; eres como un útero que recibe. Si puedes escuchar, entonces la naturaleza habla, pero sin lenguaje. La naturaleza no emplea palabras. ¿Entonces qué es lo que usa? Como dice Heráclito, usa signos. Vemos una flor: ¿Cuál es el signo que contiene? No está diciendo nada, pero ¿puedes realmente afirmar que no dice nada? Dice muchas cosas pero no emplea palabras: es un mensaje sin palabras.
Para oír lo que no tiene palabras tendrás que abandonar las palabras, porque sólo lo similar puede oír a lo similar, sólo lo similar puede relacionarse con lo similar.
Cuando te sientes junto a una flor, no seas una persona, sé una flor. Cuando te sientes junto a un árbol, no seas una persona, sé un árbol. Cuando te bañes en el río, no seas un hombre, sé el río. Entonces recibes miles de señales. Y no se trata de comunicación; es una comunión. La naturaleza habla, y habla en miles de lenguas, pero en ningún lenguaje.
OSHO
Pero la idea de que el hombre tiene que estar más alto, ser superior o especial, crea problemas. El hombre no tiene que ser nada; tiene que disolverse en la totalidad de las cosas. Cuando dejamos caer todas las barreras se produce la comunión, y esa comunión es una bendición. Ser uno con la totalidad lo es todo.
ARMONIA INTERNA Y EXTERNA
Heráclito dice: Las cosas no irían mejor si todo les ocurriera a los hombres según sus deseos. A menos que esperes lo inesperado no podrás encontrar la verdad, porque es difícil de descubrir y difícil de lograr. A la naturaleza le escanta esconderse. El señor cuyo oráculo está en Delfos, ni habla ni oculta; sólo da señales.
La existencia no tiene lenguaje..., y si dependes del lenguaje no podrás comunicarte con la existencia. La existencia es un misterio, no puedes interpretarlo. Si lo interpretas, lo pierdes. La existencia puede ser vivida, pero no pensada. Se parece más a la poesía que a la filosofía. Es una señal, es una puerta. Muestra, pero no dice nada. No podemos acercarnos a la existencia a través de la mente. Si piensas sobre ella, puedes seguir pensando, pero, por más que lo hagas, nunca la alcanzarás, porque el propio pensamiento es la barrera. El pensamiento es un mundo privado, te pertenece; a continuación te deja encerrado, encapsulado, prisionero dentro de ti mismo. Si no piensas, dejas de ser; dejas de estar encerrado. Estás abierto, te haces poroso, la existencia fluye dentro de ti y tú fluyes en la existencia.
Aprende a escuchar: escuchar significa estar abierto, vulnerable, receptivo, pero de ningún modo significa pensar. Pensar es una acción positiva. Escuchar es pasivo: eres como un valle que recibe; eres como un útero que recibe. Si puedes escuchar, entonces la naturaleza habla, pero sin lenguaje. La naturaleza no emplea palabras. ¿Entonces qué es lo que usa? Como dice Heráclito, usa signos. Vemos una flor: ¿Cuál es el signo que contiene? No está diciendo nada, pero ¿puedes realmente afirmar que no dice nada? Dice muchas cosas pero no emplea palabras: es un mensaje sin palabras.
Para oír lo que no tiene palabras tendrás que abandonar las palabras, porque sólo lo similar puede oír a lo similar, sólo lo similar puede relacionarse con lo similar.
Cuando te sientes junto a una flor, no seas una persona, sé una flor. Cuando te sientes junto a un árbol, no seas una persona, sé un árbol. Cuando te bañes en el río, no seas un hombre, sé el río. Entonces recibes miles de señales. Y no se trata de comunicación; es una comunión. La naturaleza habla, y habla en miles de lenguas, pero en ningún lenguaje.
OSHO
2 comentarios
buho -
En contacto con la naturaleza, si te lo propones, es increíblemente fácil. Acércate a un árbol y acaricia su corteza, intenta rozar sus hojas con tu mano, busca la comunión con él. A mí me encanta abrazarlos, son fuertes, vigorosos y están toda tu vida ahí dando sombra, cobijo y algun que otro consuelo. Inténtalo....
Corazòn... -
Este post me puso a pensar (cosa q hago mui poquito...) y mira, tiene toda la razòn, que bonito es leer, escribir pero "casi" todos somos prisioneros de nuestros pensamientos...el cerebro nos comanda a su antojo...y nosotros obedecemos por convicciòn. La libertad existe en el CEREBRO...ahi es donde nace todo...me estoi enrollando, pero lo que quiero decir: Me gustarìa tanto algun dìa...Aunque sea por un solo instante poner en practica lo q expones aquì...Un saludo.
;o)