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buho

IBON

IBON Recuerdo cuando Ibon nació. Sus primeros días que para mí estuvieron llenos de ternura y desesperación. Ternura enorme al comprobar que contemplaba el pedacito de cielo que se había formado dentro de mí y desperación al escuchar su llanto. Abrazada a él terminábamos llorando los dos.

No paraba de llorar, día y noche. Resultó que yo tenía muy poquita leche que darle y el pequeñín pedía de comer sin poder satisfacer su hambre. No sabía que hacer. Unos decían que tenía cólicos y otros pretendían calmarlo con un simple acune. Parecía que todo el mundo sabía más que yo.

Después vino la pelea con el puré de verduras, sus continuos catarros, bronquitis, dos veces varicela, tosferina.... Vamos que aprendí poquito a poco a cuidar de un muñeco, porque al fin y al cabo eso era, un muñeco. Comer, cagar, mear, llorar, pelear con sus crisis de tos....

Ahora ya no tengo muñecos, sino una personita que continuamente me pregunta cosas y a la cual tengo que darle lo mejor de mí, y a veces lo peor. Me sorprende muchas veces, con su actitud, con su pequeña madurez (la que corresponde a su edad). Cuando vamos a la playa, sacrifica su bocadillo para poder meterse al agua, pero si decide merendar, se conforma a jugar con el cubo y la pala.

Hace poco estuvimos en Port Aventura. Tuvo ocasión de abrazar a Woody y a la Pantera Rosa y estaba alucinado. Le he explicado muchas veces que los dibujos animados son de mentiras, pero a estos muñecos que tenía delante los pudo abrazar.

Días después seguía con la cantinela de los muñecos y se me ocurrió decirle que dentro había personas. Se enfadó conmigo y mucho, por cierto. Para él no cabía opción de irrealidad en lo que había visto y sentido. Decidí aparcar el tema. Me da mucha tristeza saber que llegará un momento en el que se entere de que el Olentzero es un personaje de ilusión o que no existen los Reyes Magos.

Pero para cada edad hay un tiempo. Y ahora para él, es el tiempo de disfrutar de sus sueños con toda la intensidad que su vida se lo permita. Y yo pienso seguir junto a él, para disfrutar de su linda carita.

7 comentarios

buho -

Greg: A veces a cualquier edad podemos tener fantasías y pueden ser tan reales....
Besos

GreGori -

Es extraño pensar que a esa edad, la fantasía siempre nos parece mucho más veraz que la realidad.

buho -

Trini: Sin duda ahora lo disfruto muchísimo más que antes y con mucha alegría, aunque ahora también tengo que aportar mayor razonamiento a lo que le digo.
Me produce mucha alegría verle crecer. Besos.

Brisa: Un beso gordo.

Erik: Ni lo dudes que lo disfruto. Y que bien me sabe.
Besos

Mary: Segura, no segurísima de que guardo todos y cada uno de los poemas y escritos que realizo. Y de los de él, más si cabe.

Besos

_Mary_ -

¡¡Buho!!
Que hermosas palabras para ese pequeño, tu hijo.
Todas estas palabras enlazadas en hermosos escritos, guárdalas para cuando sea grande y comprenda tu inmenso amor de madre, bueno me aventuro a mencionar esto, pero creo que ya lo haces.
Saludos desde México, querida amiga.

erik -

Pues disfruta cada minuto porque van creciendo, Maria ya tiene nueve, aunque cada edad tiene sus cosas tiernas. Luego ya grandes tienen otras y asi iremos pasando
Pero yo Sigo viendo a Olga como cuando la saque del Hospital en una cestito. Y ya esta en la universidad.

Sigue siendo igual de bonito.

Brisa -

precioso... :) Un beso

Trini -

Son cosas inevitables en la cadena de la vida. Es triste, sí, lo sé; pero no se para el tiempo como quisieramos a veces co respecto a los hijos.
Disfruta de cada tiempo al maximo y eso tendrás siempre vivo en tu corazón.

Besos para los dos